Hablemos de Clia
Clia Joyas nace en octubre de 2019 como respuesta a una necesidad profunda de expresar pensamientos, darle vida a ideas, trazar nuevos caminos y sin lugar a dudas emprender.
El concepto de versatilidad es nuestra insignia y por esta razón, creamos colecciones que cuentan historias, que son una extensión de nuestro sentir, pensar y de la forma en que concebimos la vida misma, trasmitiendo en ellas nuestro carácter y esencia.
En el corazón de nuestro proceso se encuentra el compromiso con la artesanía tradicional. Cada joya es cuidadosamente elaborada a mano por hábiles joyeros artesanos que han perfeccionado su oficio con los años.
A lo largo de las colecciones presentadas, hemos mostrado nuestras destrezas en diferentes técnicas de joyería como lo son: repujados, calados, casting, esmaltados… entre otros.
Nuestro enfoque en la artesanía no solo garantiza la calidad excepcional de cada pieza, sino que también añade una dimensión única de carácter y autenticidad. Cada joya de CJ cuenta su propia historia, llevando consigo el amor y el trabajo de quienes las elaboramos.
En CJ creemos en la importancia de la conexión emocional que nuestras joyas pueden crear.
Materiales y Técnicas
Nuestras joyas son elaboradas en su base en bronce. Preservando los procesos artesanales de la joyería tradicional, pero siempre proponiendo y dándole visibilidad a las ideas de diseño que le da voz e identidad a CJ. Posterior a la elaboración, se realiza un proceso llamado “Baño electrolítico”que básicamente se trata en aplicar un recubrimiento metálico sobre una superficie de la joya. Este proceso se lleva a cabo sumergiendo la pieza en una solución electrolítica que contiene iones del metal deseado para el recubrimiento, como oro, plata u otros metales preciosos.
El baño electrolítico es utilizado para mejorar la apariencia estética de las joyas, proporcionar protección contra la corrosión y mejorar la durabilidad de la pieza.
Cómo último paso, las piezas son cubiertas con laca cataforetoica conocida como laca catiónica o laca catódica, es un tipo de recubrimiento que se aplica mediante un proceso conocido como cataforesis. Este proceso electroforético utiliza una corriente eléctrica para depositar una capa uniforme de pintura sobre una superficie metálica. El resultado final es una capa de recubrimiento uniforme y duradera que proporciona protección contra la corrosión
